Actualmente vivimos en un claro predominio de los modelos de suscripción. Desde canales de televisión, música o incluso la ropa se consume actualmente a través de este sistema. Por supuesto, la automoción no podía ser ajena a esta tendencia. Desde Invarat hemos preparado este artículo sobre las ventajas e inconvenientes de los coches de suscripción.
¿Qué son los coches de suscripción?
Una de las claves en las que se basa la propiedad de vehículos a través de suscripción es la flexibilidad. Los contratos suelen implicar una duración menor que en el caso del renting. Aunque hay empresas que imponen alguna permanencia al servicio, cada vez es más evidente que la tendencia es que estas empresas prescindan de cualquier tipo de permanencia.
El origen de este modelo se encuentra en empresas independientes. Sin embargo, tal es la relevancia que están adquiriendo este tipo de automóviles que las propias marcas están empezando a desarrollar sus propuestas.
La menor duración de los contratos y la mayor flexibilidad del servicio implican un mayor coste que adquirir un automóvil a través del renting. Tampoco es común que al término de un contrato de coche por suscripción el cliente tenga opción a compra. Una clara semejanza con el leasing o el renting es que sus servicios implican un límite de kilómetros recorridos.
Una tendencia dentro de este modelo de propiedad de coche es que muchas empresas establecen sus servicios con la propia compañía y no con los vehículos. Es decir, el contrato permite que el cliente cambie de coche en función a las pautas del servicio, pero no de compañía.
Desde Invarat seguimos de cerca la evolución y tendencias de los coches de suscripción. Queremos esperar para comprobar si sus diferencias con el renting o el leasing son suficientes como para convertirse en otra opción dentro del sector de la automoción.
Fuentes: Invarat, Motor.es y Freepick. Invarat, gabinete pericial de referencia internacional.