Una encuesta realizada por CARFAX aporta un dato curioso: 1 de cada 3 personas compraría un coche averiado. Este dato nos lleva irremediablemente a preguntarnos los motivos por los que alguien estaría interesado en comprar un vehículo con daños.
La ventaja más clara es que el precio sufriría de una importante rebaja acorde con el grado de daño experimentado. Además, la posterior restauración representa una revalorización del automóvil. Los inconvenientes son también claros pues se trata de un coche con daños. Antes de nada, cabe recordar que nos referimos a la compra de coches averiados correctamente informada. Siempre que se den estos casos el vendedor debe haber detallado al comprador cualquier desperfecto.
Las personas que acuden a la compra de vehículos averiados son en su mayoría restauradores o personas con conocimientos en mecánica. La compraventa de automóviles con daños les permite acceder a vehículos con un precio reducido cuyos desperfectos se pueden solventar con mayor o menor facilidad.
¿Qué hacer en caso de comprar un coche averiado?
Siempre partiendo de la premisa de que se ha comprado un coche cuyos daños el nuevo propietario ya conocía, lo que debe hacerse es llevarlo a un taller mecánico. Serán los profesionales formados para dicha tarea quienes realicen la reparación de la avería en un establecimiento adaptado a ello y siguiendo un procedimiento eficaz y reglamentado.
La reparación efectuada de forma profesional es la única forma de que la avería este correctamente reparada y que no vuelva a aparecer. Claro está que el proceso de tener que llevar un vehículo recién comprado al taller es uno de los principales motivos que tiran para atrás a la hora de comprar un automóvil averiado.
Fuentes: Invarat, CARFAX y Canva;. Invarat. gabinete pericial de referencia internacional.