En principio, el color del coche es una elección personal sin más importancia que nuestro vehículo nos guste más. Sin embargo, el estudio realizado por CarVertical pone en duda que se trate de un tema baladí. El análisis determina que ciertos tonos son más propensos a sufrir accidentes que otros.
La afirmación más llamativa es que los coches grises y blancos son los más seguros. Concretamente los grises tienen un 44,7% de accidentes registrados y los blancos un 44,5%. El principal motivo lo encontramos en que los colores claros destacan más en carretera. El resto de los conductores los detectan con mayor facilidad.
Los coches marrones, amarillos y rojos son los más susceptibles de sufrir accidentes
Como contraparte encontramos los colores de vehículo más propensos a sufrir accidentes en carretera. La lista la lidera el marrón con un 51% de accidentes registrados, seguido del amarillo 50.6% y el rojo con un 49.8%. En esta ocasión el amarillo y rojo están muy asociados a vehículos deportivos. Los dueños de este tipo de automóviles son especialmente propensos a pisar el acelerador.
En un punto intermedio encontramos el negro y el azul. Continuando con los resultados del estudio los coches de color negro tienen un 49.1% de registros de accidentes de tráfico y los azules un 47.7%. El informe acaba mencionando que los accidentes de tráfico se deben a más factores a parte del color. Los hábitos de conducción, la densidad de vehículos en circulación o el estado de las vías son factores cruciales.
Este estudio resulta especialmente interesante si se cruza con el realizado por Axalta sobre los colores preferidos entre los compradores de coches. El blanco es, sin lugar a dudas, el preferido con un 34% de las ventas. Lo acompañan el negro con un 21% y el gris con un 19%.
Fuentes: CarVertical, Axalta, Invarat y Canva. Invarat. gabinete pericial de referencia internacional.